Se preguntaría Dios y ahora, ¿qué hago con tanto calenturiento?
APUNTES PARA LAS REDES
POR HOMERO T. CALDERÓN
En Tabasco se generan ideas a veces muy brillantes. Se inventan toda clase de negocios. Hombres y mujeres de prestigio tiran los dados pretendiendo hacer el negocio de su vida con el menor esfuerzo. A veces esos negocios funcionan hasta que esa parte de “mala leche” en que alguien pensó, empieza a desajustarse y a entrar en problemas.
Por ejemplo, AMLO, el presidente de la república, trajo desde sus inicios de político en Tabasco, a uno de esos seres que creen en el éxito. Se llama JAVIER MAY RODRÍGUEZ. Este hombre, después de muchos años de andar a pie, “buscando el éxito” en la política, pensó que él podría gobernar Tabasco.
Y empezó a pegar los ladrillos del edificio que soñó primero, y después, proyectó. Su “problema” inicial es que apenas terminó su educación preparatoria. Digamos que es un bachiller como miles de estos que caminan por Tabasco. Así que muchos se dijeron, “si éste, que apenas terminó la “prepa” quiere ser gobernador del estado, “¿yo” (el EGO) por qué no?
Y de repente, MORENA, el partido en el poder, tuvo que registrar a 18 (15 hombres y 3 mujeres).¡Eureka!, los tabasqueños que desde que se levantan andan buscando algo que comer en el mercado; o curándose su mal de ojos, o “enterrando a su muertito”, tienen que ponerse a pensar que 18 tipos y tipas –cada uno por su lado- ¡QUIEREN SER EL GOBERNADOR DE TODO UN ESTADO!…
Dios bendito. Se preguntará ese tabasqueño que desde primera hora anda buscando dinerito para comer: Y AHORA, ¿QUÉ HAGO CON TANTO “CALENTURIENTO”?….
Y aquí me tiene usted a media madrugada (Son las 2: 30 de la madrugada de este jueves 28) tratando de entender a estos diablos que piensan que la GUBERNATURA es como escoger a la “Flor Más Bella”. Mi difunto amigo, el músico Manuel Pérez Merino tendría que cambiar un poco la letra de su famosa canción. (“Noche de fiesta, se está escogiendo al político más feo, pero si usted así lo desea, podría escoger al que a usted le guste más”) Ichi…
