Sin Remitente
Con las lluvias recientes que no son las más fuertes ni constantes de la temporada, las plantas de agua potable en gran parte de Tabasco sufren de apagones o de bajones en el suministro de energía que provee la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y usted o yo nos quedamos sin agua o hasta sin refrigerador.
Lo sucedido no es nuevo, pero sí ha ido en aumento sin que a la fecha el director de la CFE, Manuel Bartlett, y sus directivos en Tabasco hayan hecho algo para solucionarlo cuando ya tenemos en cima los frentes fríos y la avanzada de huracanes.
La Comisión Estatal de Agua y Saneamiento (CEAS) que dirige Armando Padilla tardó mucho en reaccionar para denunciar o demandar a la CFE que atendiera las deficiencias de suministro de energía, y ha tenido que lidiar también con las protestas de ciudadanos como la de Comalcalco o de Paraíso que llevan semanas sin agua porque la energía no llega o llega poco a las plantas y no abastecen.
No pasará mucho tiempo para que las protestas de los ciudadanos se generalicen y acaben en las calles de Villahermosa y en las afueras de Palacio de Gobierno.
Y no pasará mucho tiempo porque tanto la CFE como el mismo gobierno estatal parecen indolentes dejándoles a los gobiernos municipales una responsabilidad que no tienen: la de reparar las fallas y ampliar las capacidades del suministro de energía para que las plantas funcionen y la gente tenga agua para satisfacer sus necesidades básicas.
Aunque el titular del CEAS quiso darle a la protesta que ciudadano de Comalcalco realizaron en sus oficinas de Paseo de la Sierra, porque la encabezaron los senadores Ovidio Peralta, y los diputados Jorge Bracamontes y Lorena Méndez Denis, así como el alcalde Gregorio Espadas, que por lo demás es parte de su labor, la realidad es que la CFE sí tiene una alta responsabilidad y el gobierno estatal que preside Carlos Manuel Merino no se ha puesto al frente para solucionar el problema de fondo que crece en los municipios y en particular en Villahermosa.
Ya los alcaldes se están cansando de mesas de trabajo con el CEAS que no están atendiendo el problema de origen y si no actúan en consecuencia para que el gobierno estatal ejerza una presión mayor contra la CFE, se podrían ver rebasados por una población que no está dispuesta a seguir soportando la falta de agua en sus hogares por las fallas de suministro de energía que hasta hoy no han resuelto ni menos hablado claro al respecto.
Las lluvias están a semanas de intensificarse y por si no bastara el desabasto de agua por culpa de la CFE, se asoma ya la amenaza de las inundaciones.
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