Isset: El Agandalle de Teresa (charrismo sindical)
Por Mario Gómez y González
El siglo pasado el sindicalismo mexicano vivió sus mejores días; líderes charros que se hiciéramos inmensamente ricos a costa de las cuotas de los trabajadores.
Sin embargo, no bastó con desarticulaciones como cuando el presidente Carlos Salinas de Gortari, puso tras las rejas a la Joaquín “La Quina” Hernández Galicia, a Salvador Barragán Camacho, entre otros dirigentes del otrora poderoso sindicato petrolero.
O la encarcelación de Elba Esther Gordillo, quien dirigía al sindicato más poderoso de Latinoamérica, el SNTE; pero esos ejemplos no han bastado para acabar con esas prácticas.
Hoy quedan aún líderes charros como Ricardo Aldana herederos de Romero Deschamps, o Napoleón Gómez Urrutia quien desde Canadá dirige a los mineros de México desde hace décadas, o Francisco Hernández Juárez eterno charro de los telefonistas.
En Tabasco, también han existido y subsisten liderazgos charros o cacicazgos con tomas de nota, que vienen haciendo su agosto desde hace varios sexenios, perpetuándose para seguir exprimiendo a la base trabajadora; tal es el caso de Teresa García Rodríguez, líder del sindicato del ISSET, quien tiene asolados a sus agremiados del SUITISSET.
Resulta que, los agremiados al SUITISSET, encabezados por el secretario de organización Miguel Ángel Motte Bello, comenzaron una serie de manifestaciones y protestas públicas, rechazando la reelección de Teresa García y exigiendo con firmeza la realización de una nueva elección conforme a los estatutos.
Y es que Teresa García, argumentando la complicidad de Narciso Contreras, ex presidente del Tribunal estatal de conciliación y arbitraje, pretende perpetuarse en la secretaría general del sindicato hasta el año 2030, verbi gracia las irregularidades jurídicas que cometió en el proceso del año pasado, pues a pesar de que los periodos sindicales son de tres años, ella lleva nueve años frente al SUITISSET.
En sus reclamos, los trabajadores señalaron que Teresa García, no ha convocado (ni convocó) a asambleas formales en las que se ha reelegido, mediante el método del voto “a mano alzada” y sin puntos de acuerdo en la convocatoria respectiva; pero eso sí, amenazando a diestra y siniestra, hacia quienes no están de acuerdo con su proceder.
Se sabe que la secretaría de gobierno y la nueva presidencia de conciliación y arbitraje, ya tomaron cartas en el asunto, observando que la razón les asiste a los trabajadores; a pesar de que la “lideresa”, sacó a relucir un supuesto padrinazgo con Rosendo Gómez Piedra, destacado abogado y funcionario del gobierno de la república.
Los quejosos dejaron claro que no es asunto, ni lucha personal, sino demanda de justicia laboral, por lo que las protestas y manifestaciones continuarán a pesar de las amenazas y otras irregularidades, que ya fueron denunciadas ante las autoridades competentes.
La toma de nota actual – apócrifa, por cierto- le está dando derecho a Teresa García (en claro madruguete del TECyA), a permanecer en el cargo hasta el 31 de diciembre de 2030, por lo que insisten en su revisión, a fin de convocar a nuevas elecciones (el padrón es de más de mil 500 trabajadores) y verificar si la base quiere que continúe al frente del SUITISSET.
El cacicazgo de María Teresa García Rodríguez, está llegando a su fin; los nuevos magistrados del tribunal-se sabe- ya revisaron la toma de nota y comprobaron que no era procedente la reelección, por lo que, pronto habrá elecciones en el SUITISSET y los trabajadores podrán elegir libremente y conforme a la ley, a su nuevo secretario general. Estaremos al pendiente de este asunto.
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