Gobernadoras y gobernadores respaldan a Sheinbaum tras señalamientos por protestas en EE.UU.

La Conferencia Nacional de Gobernadoras y Gobernadores (CONAGO) expresó de nuevo su respaldo institucional a la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, tras los recientes señalamientos relacionados con las manifestaciones de migrantes ocurridas en Los Ángeles, California.
En un comunicado emitido el 10 de junio, las y los mandatarios estatales que integran la CONAGO subrayaron que la presidenta de México nunca ha convocado a protestas violentas, y que, por el contrario, ha defendido en reiteradas ocasiones el diálogo, la paz y el respeto mutuo como vías fundamentales para la resolución de diferencias.
“La presidenta Sheinbaum ha enfatizado el valor del diálogo como vía para la resolución de diferencias”, señala el documento.
El pronunciamiento se da luego de que Kristi Noem, secretaria de Seguridad del equipo del expresidente Donald Trump, acusara a Sheinbaum de presuntamente alentar protestas violentas en territorio estadounidense. Las movilizaciones de migrantes, en rechazo a las redadas migratorias impulsadas por sectores conservadores, han provocado diversas reacciones políticas a ambos lados de la frontera.
Ante este contexto, la CONAGO llamó a mantener la serenidad y la institucionalidad en el tratamiento del tema, al tiempo que reiteró la solidez de la relación bilateral.
“México y Estados Unidos son países vecinos, aliados y socios estratégicos. Los gobiernos de ambas naciones han construido mecanismos de coordinación sólidos y eficaces”, afirmaron los gobernadores.
Asimismo, el organismo reconoció el papel central que desempeñan las y los migrantes mexicanos en Estados Unidos, no solo en lo económico, sino también en lo cultural y social, y refrendó su compromiso con la unidad nacional, la soberanía y la cooperación internacional.
“México es un país democrático que valora profundamente la cooperación internacional”, concluye el pronunciamiento.
Con este posicionamiento, las y los mandatarios estatales buscan cerrar filas en torno a la presidencia y evitar una escalada diplomática con Estados Unidos, apelando al entendimiento institucional y al respeto bilateral como base de la relación entre ambas naciones.