Trump desafía a farmacias con aranceles nunca antes vistos


La Chispa trae noticias del resto del mundo, informando que Trump desafía a farmacias imponiendo aranceles históricos a los medicamentos importados. Durante décadas, los fármacos se mantuvieron al margen de las guerras comerciales, permitiendo precios accesibles y abastecimiento global sin interrupciones. Sin embargo, Trump ha roto con esta tradición. Ahora, el presidente propone aranceles de hasta 200%, sorprendiendo tanto a fabricantes como a consumidores y desatando una ola de incertidumbre global.
¿Por qué Trump desafía a farmacias ahora?
El trasfondo de esta medida va más allá de lo económico: Trump busca reposicionar a Estados Unidos como un líder autosuficiente en la producción farmacéutica. Con su retórica nacionalista, asegura que esta ofensiva devolverá empleos, inversión y autonomía industrial al país. Sin embargo, los expertos no son tan optimistas.
El precio oculto de la independencia farmacéutica
Según analistas, el impacto directo recaerá sobre los pacientes. Los medicamentos genéricos, que representan el 92% de las recetas médicas en EE.UU. serían los más golpeados. La frase Trump desafía a farmacias toma un nuevo matiz aquí: este desafío podría traducirse en aumentos de entre 10% y 14% en tratamientos esenciales como antivirales, antibióticos y medicamentos oncológicos.
Además, la posible escasez podría generar una crisis sanitaria sin precedentes, sobre todo si los pequeños fabricantes abandonan el mercado por falta de rentabilidad. Esta situación afectaría especialmente a quienes dependen de tratamientos económicos, vulnerando su derecho a la salud.
Heridas del pasado: la pandemia como argumento político
La memoria colectiva del COVID-19 sigue fresca. En aquel entonces, la dependencia de China e India para medicamentos clave dejó en evidencia un punto débil en la cadena de suministro. Trump explota ese temor y utiliza la Sección 232 de la Ley de Expansión Comercial para justificar su plan. Según él, la seguridad nacional está en juego.
Inversiones prometidas… ¿pero suficientes?
Empresas como Roche y Johnson & Johnson han anunciado inversiones multimillonarias —50,000 y 55,000 millones respectivamente—, pero expertos señalan que levantar fábricas lleva años. A pesar del entusiasmo inicial, el 97% de antibióticos, 92% de antivirales y 83% de genéricos aún dependen de componentes extranjeros. Es decir, el camino hacia la autosuficiencia es largo y costoso.
Fabricantes de genéricos al borde del colapso
El sistema está diseñado para que los genéricos ofrezcan tratamientos asequibles. Pero con este giro radical, muchos laboratorios podrían desaparecer. Este fenómeno afectaría la salud pública global y tendría repercusiones en países que dependen de los medicamentos estadounidenses.
¿Independencia o salud accesible?: El dilema de un país dividido
Al final, la gran pregunta es si EE.UU. está dispuesto a pagar el precio de la independencia farmacéutica. Como señaló la experta Marta Wosińska: “Hemos deslocalizado para tener medicamentos económicos. Si queremos revertirlo, debemos rediseñar el sistema completo. ¿Hasta dónde llegaremos?”.