El Tribunal Superior de Justicia lleva a cabo conversatorio “Avances en Paridad de Género e Igualdad Sustantiva”
El Tribunal Superior de Justicia lleva a cabo conversatorio, que lleva como nombre “Avances en Paridad de Género e Igualdad Sustantiva´´.
Jueces y magistrados analizan logros en este rubro y ponderan que mujeres y hombres tienen las mismas oportunidades de desarrollo en el Poder Judicial.
El Tribunal Superior de Justicia lleva a cabo conversatorio, a cerca de la paridad de género e igualdad
Invertir en las mujeres es una cuestión de derechos humanos y la igualdad de género es todavía el mayor desafío en este ámbito, puntualizó la magistrada Patricia Sánchez Romero durante el conversatorio “Avances en Materia de Paridad de Género e Igualdad Sustantiva”, auspiciado por el titular del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), Enrique Priego Oropeza.
Ante la coordinadora del Voluntariado de la institución, Mercedes Segura de Priego, Sánchez Romero detalló que la inversión en el género femenino es un imperativo de derechos humanos y la base para construir sociedades inclusivas. El progreso es parejo, para hombres y mujeres, en estos tiempos en que ellas se han empoderado, lo que significa un beneficio común para la sociedad, anotó.
Señaló que en años recientes se han registrado adelantos para garantizar gocen de los mismos derechos que los varones y sean tratadas con equidad e igualdad. Recordó que durante la administración del magistrado Enrique Priego Oropeza se ha puesto de manifiesto que ambos géneros tienen las mismas oportunidades, no hay distinciones por raza, sexo o creencias.
Existe un avance significativo en el rubro de derechos humanos y por ende, igualdad entre ambos géneros, que tienen las mismas oportunidades para ocupar los cargos, agregó al destacar que en la actualidad en el Poder Judicial más mujeres están al frente de órganos jurisdiccionales.
Sánchez Romero hizo un llamado a los integrantes de la institución a no retroceder, pues los derechos humanos son progresivos, siempre hacia adelante. “Hoy nos encontramos en un momento crítico de la historia: nunca antes habíamos presenciado este ímpetu y movilización mundial que involucra a todos, quienes claman por la erradicación de la violencia contra las féminas”, indicó.
“No puede haber paz ni progreso ni igualdad sin los mismos derechos y plena participación de las mujeres. Y no puede haber igualdad de género sin el goce de los derechos humanos de este sector de la población, esenciales para su empoderamiento”, observó.
En el conversatorio participaron también la presidente de la primera sala civil, Martha Patricia Cruz Olán; la jueza cuarta familiar, Lorena Denis Trinidad; el juez tercero civil de Comalcalco, Francisco Javier Rodríguez Cortés, y el titular de la Sala Unitaria Especializada en Justicia para Adolescentes y Oralidad para Adultos, Samuel Ramos Torres.
Frente a ellos, la magistrada Patricia Sánchez sostuvo que si actuamos con valor, convicción y compromiso podemos transformar la violencia contra las féminas, que pasaría de ser la violación más generalizada de derechos humanos a un caso aislado. Por ello, cada violentada no debe quedarse callada, debe alzar la voz, porque tiene la certeza y seguridad jurídica que sus derechos serán válidos ante el Estado de derecho, dijo.
Manifestó que todos los días el Poder Judicial confirma su compromiso e invita a sus integrantes a promover, proteger, respetar y garantizar los derechos de las mujeres, de modo que cada una de ellas viva libre de violencia y discriminación.
En presencia de la consejera de la Judicatura, Isi Verónica Lara Andrade, quien fungió como moderadora, la magistrada Patricia Cruz Olán resaltó que por primera vez en la historia de México tenemos a una mujer presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), la ministra Norma Lucía Piña Hernández, además de que dos mujeres, Olga Sánchez Cordero y Luisa María Alcalde Luján, han sido titulares de la Secretaría de Gobernación (Segob).
Aseveró que en el Poder Judicial de Tabasco se tiene un pleno de magistrados equilibrado, en el que trabajan diez magistradas y 12 magistrados, entre ellos el magistrado presidente, Enrique Priego Oropeza, quien ha pugnado por la igualdad. En el caso de los órganos jurisdiccionales existen 66 juezas y 33 jueces, muestra de que el género femenino ha avanzado, se ha preparado, para alcanzar estos peldaños.
Mencionó entre los retos lograr la igualdad salarial, que las féminas ganen lo mismo que el hombre al ejecutar las mismas actividades, y que en los hogares se reeduque a sus miembros para que se compartan las tareas del hogar, ya que actualmente ellas desarrollan una doble jornada.
Esencial, igualdad
Francisco Javier Rodríguez Cortés, juez tercero civil de Comalcalco, consideró esencial la igualdad sustancial que establece los derechos de las personas, pero también es importante que haya igualdad formal, que esta se traslade a la vida cotidiana de las personas, que esos derechos sean verdaderamente efectivos y no solo queden en formalidad de la ley.
Afirmó que en cuestión política las reformas en el ámbito electoral y constitucional fueron cruciales porque se logró que 50 por ciento de las candidaturas en comicios a nivel federal y local sean para mujeres. En el proceso, uno de los partidos políticos registró a diez de ellas en la contienda para ser alcaldesas. “Esto significa un desplazamiento ligero en el número de candidatas, pero está justificado porque generalmente o históricamente la mujer había estado rezagada en la cuestión política”, precisó.
Indicó que debemos cambiar como sociedad para que la mujer sea respetada en todos los ámbitos y destinar recursos en los planos nacional y estatal para disminuir la deuda histórica con sus derechos a la educación, al trabajo, a la justicia.
Lorena Denis Trinidad, jueza cuarta familiar, estimó que “las mujeres dejamos de ser invisibles y ahora la lucha de los siglos XIX y XX tiene resultados, ya que antes era impensable hablar sobre igualdad de género”.
Relató que las niñas desde antes del nacimiento eran etiquetadas, invisibilizadas y se las menospreciaba si no eran varones. Posteriormente, se les negaba la posibilidad de estudiar, porque cuando se casaran el marido las iba a mantener y se las reducía a las labores del hogar y a criar a sus hijos.
Entre los cambios fundamentales –citó– se encuentran los roles en la familia. Ahora se habla de compartir el trabajo doméstico, al que se le da valor, y muchas son profesionales de la administración de justicia, están en puestos de decisión. En 2018 la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) lanzó una convocatoria exclusiva para el género femenino porque de cien por ciento de sus integrantes sólo 38 por ciento eran mujeres y para equilibrarlo se hicieron exámenes de oposición, comentó.
Denis Trinidad explicó que algunas estadísticas establecen que faltan 131 años para eliminar la brecha de género, de ahí que se deba hacerlo en el menor tiempo posible. “Si queremos niñas y mujeres seguras con valores, hay que enseñar la igualdad de género en casa, educar a la población en la perspectiva de género y dejar de normalizar la violencia”, recomendó.
Samuel Ramos Torres, presidente de la Sala Unitaria Especializada en Justicia para Adolescentes y Oralidad para Adultos, puso sobre relieve la figura de la mexicana en los anales de la historia, en los ámbitos político, social y económico, como Leona Vicario y Josefa Ortiz de Domínguez. “Aunque en su momento no fueron reconocidas, hoy debemos decir que el Estado mexicano ha estado impregnado de la presencia de la mujer. Y no escapa de la historia que se está escribiendo que la mujer está presente, es visible y está dejando huellas importantes en nuestro país”, apuntó.
Destacó cambios sustantivos en las leyes, el Derecho, la política, en los que con marcos normativos adecuados se ha reducido ese trecho entre géneros, que aspiramos a los mismos lugares, espacios, salarios, candidaturas. Sin embargo, es menester fortalecer esta perspectiva para el bienestar y avance de ellas en los aspectos económico, familiar y sobre todo, destinar recursos para que sean reales y efectivas las declaraciones románticas plasmadas en los marcos teóricos, refirió.
Porque de acuerdo con la más reciente Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH) en Tabasco, siete de cada diez tabasqueñas están siendo violentadas de manera física, psicológica, económica o patrimonial, por lo que se requiere tengan apoyo y sepan qué pueden hacer y a dónde acudir en caso de una agresión, sin la disyuntiva de que si deja al proveedor del hogar se puede morir de hambre, pero si se queda quizá puede perder la vida.
Ramos Torres subrayó que la mujer “debe aprender a poner límites, decir ‘¡No, basta!’, cuando se necesita salir de un ciclo de violencia. Finalmente, debemos reconocer y se aplaude el amor propio, fuerza y coraje que la han traído hasta aquí”, finalizó en el encuentro efectuado en el marco del Día Internacional de la Mujer.