Tabasco: Lo que se espera del gabinete de May
De Primera Mano
Por Rodulfo Reyes
Que la presidenta electa Claudia Sheinbaum Pardo esté armando un buen gabinete que ha sido bien recibido hasta por los mercados internacionales, debería constreñir a Javier May Rodríguez a integrar un equipo de trabajo eficiente y al margen de compromisos políticos y partidistas.
Los dos paquetes de nombramientos hechos por la ex jefa de Gobierno capitalino muestran que optó por la fórmula de 90 por ciento de capacidad y 10 de lealtad, a diferencia del método inverso aplicado en su momento por el aún mandatario Andrés Manuel López Obrador.
El de Macuspana les exigía a sus colaboradores 90 por ciento de lealtad y la otra parte, muy poco, apenas un décimo, de capacidad.
En cambio, Sheinbaum ha sorprendido por preferir la eficacia y hacer las designaciones conforme a la ciencia.
“Ojalá aquí ocurra lo mismo”, es la frase que se escucha en centros de reunión tabasqueños donde se habla de política, cuando se relacionan los nombramientos que está haciendo la virtual titular del Ejecutivo federal con las designaciones que dará a conocer el próximo lunes 1 de julio el gobernador electo.
Por lo pronto, la única luz sobre el gabinete de May es que se perfila para la Secretaría de Finanzas un hermano de Octavio Romero Oropeza, director de Pemex, de nombre Julián, de quien solo se sabe que es subsecretario de Ingresos de la Secretaría de Finanzas.
En anteriores administraciones, el representante del nuevo gobierno en la entrega-recepción a cargo del área financiera era el titular de esa dependencia en el ejercicio siguiente.
A menos que se tenga una “carta tapada”, todo apunta al hermano del titular de Pemex, lo cual cobra sentido por la cercanía de este con la corriente ganadora en las elecciones.
La participación de Julián Romero da pistas sobre cómo estará integrado el cuerpo de colaboradores de May.
Esto es, con toda seguridad el equipo de Octavio tendrá nuevas responsabilidades en Tabasco.
También tendrán espacio hombres cercanos a Andrés Manuel López Beltrán, Andy, hijo de AMLO.
Cuando May ganó la encuesta de su partido por la candidatura al gobierno de Tabasco, el 10 de noviembre pasado, Andy fue de los primeros actores en felicitar al ex responsable del Tren Maya.
Ahora mismo se da como un hecho y se cita de ejemplo que Daniel Casasús Ruz, el amigo de López Beltrán que buscó ser abanderado a la alcaldía de Centro, sería secretario de Ordenamiento Territorial y Obras Públicas.
Por eso, que nadie se extrañe si miembros del grupo de Andy, la mayoría jóvenes que estudiaron con él, aparecen en el nuevo gabinete.
Así que nombres conocidos como el de Javier Núñez López, alto funcionario de Pemex y que viene colaborando con Octavio Romero desde que este era oficial mayor del gobierno de la ciudad de México, estarían en el nuevo directorio de funcionarios tabasqueños.
Palenque, en llamas
Mientras se acerca el día que López Obrador cambie su residencia de Palacio Nacional a su casa de campo de Palenque, crece la inseguridad en esa región de Chiapas.
Anteayer se informó que un familiar del oriundo de Macuspana fue asesinado a balazos en el municipio donde va a residir el aún mandatario nacional.
Identificado como sobrino de AMLO, Humberto Obrador, alias Becerro, y su padre fueron emboscados en un ejido de Palenque.
Humberto falleció al momento y su padre resultó herido de gravedad.
La Fiscalía de Chiapas informó que dio inicio a las investigaciones correspondientes en contra de quien o quienes resulten responsables del delito de homicidio calificado cometido en agravio de Humberto Obrador.
Medios capitalinos como el diario El Financiero dan como buena la información de que se trata de un sobrino del mandatario federal.
De verificarse que se trata de un pariente cercano, entonces el mensaje es muy claro: la inseguridad en Chiapas no distingue apellidos.
En el tiempo que le queda por vivir en Palacio Nacional al tabasqueño, muy difícilmente podrá acabarse o al menos disminuirse al crimen organizado que tiene sentados sus reales en esa zona chiapaneca donde los dos cárteles más importantes de México y posiblemente del mundo se disputan el territorio.