Suena fuerte Rafa Mollinedo.
 
						 
			Al revisar algunos perfiles de connotados tabasqueños, me he topado con el del economista Rafael Marín Mollinedo, y concluyo que —si el diablo no mete la cola y no ocurre algo inesperado— podría ser el candidato de Morena al gobierno de Quintana Roo en 2027, y seguramente el segundo tabasqueño que gobierne esas tierras caribeñas (el primero fue el priista David Gustavo Gutiérrez Ruiz).
Una reciente encuesta de GobernArte coloca a Morena a la cabeza para el 2027 (41.8% contra un 15% del más cercano competidor, el PAN. Y como lo declaró hace unos días la dirigente María Luisa Alcalde, el proceso de auscultación se realizará por sondeos y sin “tapados”. Y Según medición interna, Marín Mollinedo encabeza las preferencias con 25.16%, seguido por Gino Segura con 15.38%, y más atrás Maribel Villegas y Estefanía Mercado.
De raíces teapanecas, perteneciente a la reconocida familia Mollinedo —la señora Amadita Mollinedo (QEPD), madre de Rafael, era prima hermana de mis amigos Lorenzo y Javier Mollinedo Aguilar—, Rafa Marín ha brillado a nivel nacional e internacional. Actualmente funge como director de la Agencia Nacional de Aduanas de México, es egresado de la Facultad de Economía de la UNAM y, por paisanaje, se le vincula naturalmente con el círculo cercano del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Entre los cargos que ha desempeñado destaca su representación de México ante la Organización Mundial del Comercio, en Ginebra, Suiza. Fue responsable del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, proyecto en el que promovió su conexión con el Tren Maya, la modernización de las vías férreas Coatzacoalcos–Palenque, y la reducción de costos logísticos para fortalecer la conectividad regional. Además, ha sostenido encuentros con empresarios del Caribe para presentar los beneficios del megaproyecto.
Con preparación sólida, visión estratégica y profundo conocimiento del comercio exterior, Marín Mollinedo ha impulsado desde Aduanas un modelo de fiscalización moderno y transparente, alineado con los intereses económicos del país. Sus resultados se reflejan en los grandes decomisos de combustibles ilegales
 
 

 
  