LORENITA TIENE MALAS PALABRAS, Y MALAS VIBRAS, PERO NO TRAE NI PROYECTO NI IDEAS
Como dijo alguna vez la eximia Chabela Vargas, En México celebramos el día que nos de nuestra chingada gana. En Tabasco también. Se da el caso que Javier May Rodríguez, aparte de sus mega proyectos, que hizo conjuntamente con Andrés Manuel, lleva tres días celebrando su cumpleaños.
Esto, claro, ya sacó de su casillas a mi comadrita Lorena Beurregard, quien en alarde de cultura peyorativa, está haciendo un repaso del español golpeador: Usa dos palabras compuestas: “Lameculos” y “lamebotas”. Creo que a Lorena, candidata del PRIAN ya no está conforme con nada.
NO sé quién habrá sido su maestro de Lengua y Literatura españolas, pero quien sea que haya sido, no la cultivó omo “Buen alumna”. Cuando usted aprende a hablar es después de la secundaria. Roberto Madrazo y se servidor tuvimos los mejores maestros en esta materia. Su servidor tuvo como maestro al colombiano de barranquilla, Victor Manuel López Medina su nombre contraído era “veemeleme”. “Había gracia, esplendor y agudeza en casto, limpio y grave traje”
Roberto Madrazo tuvo en el CUM de la calle Nicolás San Juan a otro legendario maestro de literatura y español, Germán Dehesa. Un día en “la Planta de Luz”, un rincón para bohemios en una callejuela de San ángel, llevé a Pepe Zurita a recrear su felicidad con él. Despúes de decir Germán que su peor alumno había sido Roberto Madrazo, Pepe Zurita lloraba de felicidad.
Pero en Tabasco, Lorena no trae nada tras ella: ni buen lenguaje, ni buen humor, ni proyecto. ¿Cómo diablos se enfrentará entonces a los tabasqueños, a los que llama “zalameros” “lameculos” y “limpia-botas”. Si hemos de ser sinceros, los tabasqueños entrarán en posesión de uno 60 mil millones de pesos en los próximos cuarro años. Lorenita, ni Juan Manuel Fócil podrían tener la mínima posibilidad de disponer de un mínimo proyecto que haga feliz a un tabasqueño. Javier en cambio seguirá cumpliendo años, no se cuántos más, y construirá un estado que ni él mismo se imaginó ue iba a construir…