Histórica Jornada Electoral Judicial.
Dos hechos de suma importancia se destacan durante la jornada electoral judicial de ayer domingo: los mexicanos cumplieron con su deber de votar, y la aparición en público -por primera ocasión desde su salida como presidente, del tabasqueño Andrés Manuel López Obrador.
El pueblo mexicano ejerció ayer, por primera vez en la historia electoral, el derecho constitucional de votar por las nuevas autoridades (1,458 cargos de ministras y ministros de la Suprema Corte de Justicia, magistraturas de las salas superiores y regionales del Tribunal Electoral, del Tribunal de Disciplina Judicial y magistraturas de Circuito y Distritos; más 72 cargos en el Tribunal Superior de Justicia del Estado: juezas y jueces penales, laborales, civiles, en oralidad y familiares).
La jornada electoral de este 1 de junio quedó marcada por las acostumbradas inconsistencias: casillas que abrieron con retraso de horario y la no asistencia de algunos funcionarios electorales.
De ahí, todo transcurrió con normalidad, pese a negativos augurios de los eternos enemigos del gobierno que promocionaron el abstencionismo. De todos modos, México hizo historia porque dio ejemplo de ser uno de los países más democráticos del mundo. Ahora solo queda que las nuevas autoridades se desempeñen con honestidad, transparencia e imparcialidad.
A partir de ahora, nuestro país podrá transitar con el mejor sistema judicial; ahora sí, aunque suene mal, pero similar al de Dinamarca. Claro está, como asientan especialistas de la universidad de Copenhague, ningún sistema judicial es perfecto, pero se intenta perfeccionar mediante códigos valóricos, en particular, en la independencia de la justicia.
La salida a votar de López Obrador, allá en el municipio de Palenque, Chiapas, volvió a encender las farolas de la política nacional, principalmente cuando afirmó que le da mucho gusto vivir en un país libre y democrático; y tras de esa declaración expresar : “Tenemos a la mejor presidenta del mundo, Claudia Sheinbaum. Lo repito: la mejor presidenta del mundo”. No pues, hasta se chorrearon los criticones. Es todo.
