En Morena, va fórmula doble AA

Es bola cantada. El presidente Andrés Manuel López Obrador confirmó en la mañanera de ayer que su hijo, Andrés López Beltrán, participará en política, “eso me lo planteó y quiere apostar a ser electo”.

Dijo que “va a participar en Morena, quiere ayudar a consolidar Morena. No voy yo a influir en nada, pero él sí quiere participar”, reiteró.

De este modo, el Ejecutivo federal confirma lo que dio a conocer desde el pasado 3 de septiembre La Política On Line, medio que refirió sobre jaloneos que había al interior del partido a fin de que en la nueva dirigencia de Morena quedarán cuadros cercanos a AMLO y de Sheinbaum.

Así, se decía que la secretaría general del partido era para Esthela Damián Peralta, de los cuadros cercanos a Claudia Sheinbaum, tanto es así que “formó parte del equipo de campaña de la presidenta electa y antes fue integrante de su equipo de gobierno en la Ciudad de México”, mientras que Luisa María Alcalde, sería la presidenta del partido.

Después de diálogos y acuerdos surgió el nombre de Andy López Beltrán, quien, hasta el momento de redactar estas líneas, figura para la secretaría general, y Esthela Damián podría ocupar la de organización.

El asunto es que la fórmula Andy López y Alcalde va porque va. Y lo que hay que decir es que el choco López Beltrán no es ningún improvisado en activismo y militancia política. De los tres hermanos, al menos este franjero, fue a Andy al que vi siempre a lado de AMLO en las campañas.

Recuerdo al menos dos mítines: en el poblado de Santa Rosalía en Cárdenas y en la comunidad de Gutiérrez Gómez, del Plan Chontalpa, esto durante la campaña para la gubernatura de Raúl Ojeda por el PRD.

Estoy hablando de 2006, y ahí andaba ya el hijo de AMLO, (yo subía como reportero al templete porque Gerardo Gaudiano era el particular de Ojeda y me dio una tarjeta para que el equipo de logística no pusiera traba cuando accedía a la tarima).

Menciono este pasaje porque para apoyar a Raúl Ojeda, en los mítines tomaba la palabra López Obrador y en cada concentración repetía esta frase: “Me quiebro, pero no me doblo”, un metro atrás estaba de pie Andy, y corregía al padre: “es, me doblo, pero no me quiebro”, incluso en una de mis notas consigné ese detalle.

Luego entonces, el que trae la política en las venas es Andy López Beltrán y, por supuesto, como militante y activista de Morena, tiene todo el derecho de tomar parte en los destinos de ese partido.