Elección judicial
En los últimos días ha habido un interés ciudadano por las campañas para elegir ministros, jueces y magistrados. Es más, ha habido mayores contenidos en torno a la participación de candidatos en todo el país.
En un hecho sin precedentes, los candidatos a ministros, jueces y magistrados están en campañas desde el pasado mes de abril y así lo estarán hasta el 28 de mayo próximo.
En este periodo proselitista, aunque al principio no fue así, se ha despertado una inquietud ciudadana porque, primero, se trata de una elección histórica, y segundo, porque muchos no quieren perderse la oportunidad de participar en la elección de ministros, jueces y magistrados. A tres semanas de que concluya el periodo de campañas, será interesante saber cómo este interés ciudadano se reflejará en las estadísticas una vez concluya la jornada electoral del 1 de junio, y se conozcan los resultados. Sin duda, más allá de conocer quiénes ganaron la contienda, la atención se centrará en la afluencia de votantes.
Como escribí el mes pasado, en el caso de los candidatos en Tabasco, se está repitiendo un patrón: discursos videograbados en parques y calles, propuestas con relación a impartir justicia pronta y expedita, el hecho de establecer un puente con los ciudadanos y el tema de no prestarse a la corrupción, es decir, el de sí abrazarse a los ideales de la transformación.
Si bien la ciudadanía está ante la oportunidad de cambiar a ministros, jueces y magistrados si valoran a conciencia sus actuaciones de los últimos años, también es importante no perder de vista que algunos de ellos bien podrían continuar en funciones, con el respaldo del voto en la jornada electoral de junio próximo, debido a sus trayectorias (y no me refiero al cúmulo de títulos académicos que últimamente pululan) sino a sus actuaciones imparciales como servidores públicos del Poder Judicial, y a que, sumado a las horas de trabajo derivado de la atención de expedientes, dan celeridad a un sinfín de casos que se presentan.
Aunque se cuestionó la reforma al Poder Judicial, de parte de ministros, jueces, magistrados y otros trabajadores del gremio, resulta importante señalar lo que igualmente comentan varios de los candidatos, ajenos a la herencia de puestos en salas y oficinas: que sin la reforma habría sido imposible aspirar o competir para ser impartidores de justicia.
Sin embargo, no podemos negar que los candidatos están haciendo uso de toda plataforma digital en aras de llegar al electorado, y menos olvidar que se trata del primer ejercicio en la materia.
En estos días, los diarios electrónicos y las redes sociales están dando cuenta de las acciones que realizan los candidatos con el fin de posicionarse entre los electores, y más entre los jóvenes que están inmersos en TikTok, Instagram y Facebook, como lo hace todo abanderado a alcaldías y diputaciones.
Es inédito lo que estamos viviendo: el ver y escuchar a candidatos a ministros, jueces y magistrados, muchos de ellos separados de sus funciones mientras se lleva a cabo este proceso, dirigirse a los electores en la calle, a ras de piso, en foros, etcétera.
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El candidato a magistrado al Tribunal de Disciplina Judicial, Jorge Alfredo Clemente Pérez, continúa recorriendo el país y dialogando con representantes de diversos sectores sociales. El académico y abogado defensor en el sureste mexicano mantiene su discurso de que la “justicia debe estar del lado de la ciudadanía”, y no de una minoría, y ha platicado con periodistas a quienes ha explicado qué acciones emprenderá si resulta ganador en junio próximo.
