EL DOLOR DE PERDER A TRES AMIGOS

Estos últimos diez días han sido terribles pues los amigos, casi hermanos, Toño Solís Calvillo, Beatriz Luque Green y Andrés González Pagés, partieron a esa dimensión desconocida que es rendir tributo a DIOS, el que te dio la vida con toda generosidad. Duel profundamente que te hayan antecedido en ese viaje inexorable donde las estrellas son esas lucecillas que dicen: tus amigos muertos están todos haciendo una ronde de amor a dios, el que todo lo puede.

UNO: Antonio es ese batallador que tenía un celo por la buena educación. Todo lo quería para cada uno de los tabasqueños sus paisanos de nacimiento. Dios lo hizo guerrero de esas luchas donde cada niño que buscaba su lugar nen la educación tenía que pensar en Toño, el maestro que todo lo intentaba para que nadie se quedara sin el pan sagrado de la educación. Hace cuatro días murió. Y lo extrañaremos en sus luchas frontales contra la ignorancia.

DOS: Luego, la señora muerte llegó a la casa de Betty Luque Green en Teapa y se la llevó en su carruaje. Betty fue de esas luminarias que irradian sabiduría e inteligencia a todos los seres que cobijó como maestra.
Había en ella un sentido de la observación y del reconocimiento para sacar a Tabasco del horroroso lugar 32 en la estadística de la educación nacional. Llevo a Tabasco al lugar 14 en el gobierno de Andrés Granier Melo. Mucho le debemos a Beatriz por su perseverancia para sacar a Tabasco de la barranca de la ignorancia a donde otros lo han dejado caer. Descanse en paz tan adorada señora y amiga. Dios la tendrá siempre muy cerca de ella. Su bondad multiplicada es su mejor recomendación….

TRES: El tercero que dejó esta dimensión fue el escritor y ensayista, Andrés González Pagés. Me cupo la suerte de tenerlo como amigo de aventuras en la creación literaria cuando mi periódico, el “COMO”, dirigido por Samuel Cantón, fue la tabla de lanzamiento de su servidor como periodista.

De esos ya hace 35 años. Que Andrés González Pagés sea ese vínculo para poblar ese cielo tachonado de estrellas en que se convierten los que son amigos y parten al cielo desde donde cierran y abren sus ojos diciéndonos: “Aquí estoy, y aquí estarás cuando DIOS te libere de tu cuerpo terrenal”. Dios sabe lo que dispone para cada ser humano. Dios bendiga a mis tres amigos Antonio, Beatriz y Andrés. Que en Paz Descansen….