Leyendo ahora
De seguridad y adversarios

De seguridad y adversarios

Kristian Antonio Cerino

Si bien el gobernador Javier May abordó cada rubro en su primer informe, una serie de sentencias calaron hondo no solo entre los asistentes sino entre quienes las escucharon a la distancia: “nunca más el delincuente será policía” o “los adversarios están al acecho de cualquier error, porque están resintiendo la ausencia de sus privilegios y porque quieren regresar para seguir robando”.

Lo primero es una clara alusión al sexenio López Hernández-Merino Campos señalado por crear y consolidar un grupo delictivo a través de corporaciones policíacas. Lo segundo, a quienes anhelan regresar al amparo del erario (Andrade, Granier, etcétera) representando a una oposición diezmada.

Aunque el mandatario hizo mención a las 180 giras realizadas a lo largo de un año por el circuito estatal; al énfasis de las Jornadas de Atención al Pueblo en Territorio; a las 13 mil solicitudes ciudadanas y al combate de la corrupción, no perdió la oportunidad de hacer acotaciones sobre el rubro de la seguridad pública y al ataque de opositores visibles y no en este primer año de gobierno.

Cuando comenzó a hablar de cómo recibió la administración en el marco de la violencia orquestada por grupos delictivos, May dedicó unas líneas a los jóvenes quienes han visto el ejemplo erróneo de cómo acceder a recursos ilícitos trabajando del lado de criminales, reiterando que una de las prioridades -desde el primer día del presente gobierno- fue el no pactar con la delincuencia.

Para el gobernador, “recuperar la integridad y la moralidad” de la policía en Tabasco ha sido fundamental; sobre todo, el hecho de que la ciudadanía pueda percibir en los cuerpos policíacos autoridades confiables. No perdamos de vista que en dos sexenios anteriores la policía ha caído en descrédito en Tabasco: en el de Manuel Andrade cuando se creó La Hermandad, y en el de López Hernández-Merino Campos cuando operó La Barredora. Se lamenta del primero -ante todo- que cuando critica a la presente administración se olvida de que en su sexenio también la policía perdió el rumbo institucional.

A decir del gobernador May, hay confianza y respaldo de la policía actual para seguirle haciendo frente a los grupos delincuenciales y con el apoyo total de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo.

Es más, por medio de la Fuerza Interinstitucional de Reacción Táctica (FIRT) Olmeca, se logró -en este primer tramo gubernamental- la aprehensión de mil 600 delincuentes, entre los cuales se detuvieron a 120 dedicados a la delincuencia organizada, el secuestro, extorsión y cobro de piso.

“Ofrecimos devolver la paz a Tabasco y también en este rubro estamos cumpliendo”, afirmó ayer ante la concurrencia y después de haber enviado el informe por escrito al Congreso de Tabasco. Y como parte del compromiso asumido por la policía tabasqueña, el ejecutivo anunció aumentos salariales, así como a los cuerpos de bomberos.

Para sus adversarios políticos igualmente dedicó unas líneas, entre ellas, que su gobierno no está jugando a improvisar y que será imposible que retornen al poder, porque se quedarán “con las ganas” y “porque el pueblo ya les dijo adiós”.

See Also

Al anunciar obras para 2026, el mandatario usó otra sentencia para concluir el discurso: “Y si el primer año fue el despegue, ahora en el segundo año ¡agárrense!, porque nos vamos a ir con más velocidad”, añadiendo “con permisito, por favor, que estamos trabajando”.

En otra entrega habremos de retomar rubros, para el análisis, relacionados a obras públicas, educación, salud, cultura, etcétera.

 

Kristian Antonio Cerino


© 2024 Grupo Transmedia La Chispa. Todos los derechos reservados