COBATAB, fuera de control
La falta de sensibilidad y sobre todo de capacitación para hacerse cargo de un plantel educativo, sea el que sea, provoca siempre grandes conflictos cuando las cosas pueden resolverse desde el primer momento, sin represión y con toda la voluntad de dialogar y llegar a acuerdos que beneficien a todo por igual.
La marcha de la 8M el pasado sábado se volvió una gigantesca bola de fuego difícil de apagar porque ante la falta de apertura de las autoridades para platicar con las víctimas del presunto maestro violador, Miguel Bolio, y abrir las puertas para una profunda investigación sobre las acusaciones, graves, que se le hicieron al profesor, permitió a los estudiantes del Colegio de Bachilleres de Tabasco, sacar lo que se ve, traían adentro desde hace años, pero también puso al descubierto la falta de comunicación entre padres e hijos y la atención que deben poner en la vida de sus vástagos, los niños ni los adolescentes son animalitos a los que solo debes dar de comer y punto, si los padres o madres de estos jovencitos que se dicen víctimas, no solo del que acusan de violación y demás abusos sexuales, sino también de otro maestro del que dicen que es homosexual y del cual pegaron fotografías en los postes y árboles de las afueras del plantel 1 acusándolo de “acosador sexual”, José Godoy, entablaran pláticas con sus vástagos y les dieran la confianza de hablar con franqueza, no importando las palabras que utilicen, aunque sean fuertes, quizás todo esto no habría sucedido, pues se ve que los jóvenes que protestaron vieron como una válvula de escape la situación, que como decimos, no supieron controlar las autoridades del Colegio de Bachilleres.
Hay un testimonio de la mamá de una de las presuntas víctimas que dice que los hechos sucedieron hace dos años, pero hasta apenas en noviembre del año pasado denunció, es decir, dejó pasar tanto tiempo y apenas hace cuatro meses se viene a enterar de lo que le pasaba a su hija. Lamentablemente los estudiantes del turno vespertino cayeron en vandalismo, furiosos llegaron al plantel a destrozar los cristales de la dirección y salones que dan hacia la calle, aunque para eso tuvieron que trepar la barda y saltar a hacer sus destrozos, porque se enteraron de que el maestro Bolio estaba bajo resguardo de la dirección mientras los alumnos del turno matutino hacían su plantón dentro de la misma escuela y querían que lo despidieran vergonzosamente frente a todos los alumnos, principalmente de las niñas que han sido víctimas, ya que además también salió a relucir que un prefecto de nombre Juan Carlos hostiga a las menores con propuestas indecorosas.
Es decir, el Plantel 1 merece un buen cambio de maestros, claro que no de todos, porque hay excelentes docentes tanto en lo académico como moralmente. Como dijo una niña de un video que circuló desde temprano ayer mismo, NADIE LAS ESCUCHA, es hora de que tanto padres de familia y autoridades lo hagan. En el caso de los varones, señalaron al profesor de hostigamiento sexual, del que se sabe que hace dos años fue denunciado ante la Fiscalía porque el niño al que molestaba y su mamá fueron a denunciarlo penalmente, pero no se presentaron después a ratificar su acusación y este fue otro caso que quedó impune y no a causa de las autoridades. Es evidente que los maestros abusan porque tienen el poder de reprobarlos y en eso se escudan para faltarles al respeto y a sus derechos humanos de los adolescente, pero por lo mismo, la Dirección General de Evaristo Hernández Cruz y la directora del Plantel 1, Perla Estrada, deben investigar primero y dejar las puertas abiertas a los jóvenes y a las autoridades judiciales si es que, como en este caso, se presenta una denuncia penal e incluso colaborar con las autoridades.
No como sucedió con el comunicado enviado por la directora, donde tajantemente declara inocente al presunto violador y ni siquiera se compromete o hace como que se compromete a realizar una investigación en torno al caso, lo que debió hacer y conminar a todos los que se sienten agredidos a pasar a la dirección a exponerle sus casos, pero no, no hay como dijo una de las menores agredidas, no hay quien los escuche. Pero además debió dar aviso al maestro de no presentarse ayer en el plantel, precisamente porque podría presentarse un desaguisado, sabiendo que son adolescentes y que estuvieron convocando a través de las redes sociales desde el domingo, para los plantones de ayer y ayer en lugar de mandar a la maestra a amenazar a los del plantel con que los van a expulsar, les hubiesen permitido hablar y comprometerse a realizar el cambio que es urgente en la escuela, mientras el sindicato de Candelario Pérez Damián, el Independiente de Profesores y Administrativos del Colegio de Bachilleres de Tabasco, no se ha pronunciado, pese a que el docente Bolio es su delegado sindical en el Plantel 1 y no ha abierto la boca ni para defender a su sindicalizado, escondido, sin dar la cara ante el grave conflicto que pone en duda la reputación de su organización sindical.
El que sí hizo un pronunciamiento que desde ayer circula en las redes, fue el Sindicato de Trabajadores del Colegio de Bachilleres del ingeniero Melecio Cornelio un posicionamiento muy sobrio, congruente con el deber que tiene y ecuanimidad y entre otras cosas, reconoce que “los alumnos son la razón de ser de nuestra actividad laboral”, les recuerda a todos sus agremiados el artículo19 constitucional, reformado y publicado el 31 de diciembre de 2024 en el DOF, que “amplía el catálogo de delitos que ameritan prisión preventiva oficiosa el cual establece que: el juez ordenará prisión preventiva oficiosamente en los casos de abuso o violencia a sexual contra menores, delincuencia organizada, extorsión, delitos previstos en las leyes aplicables cometidos para la ilegal introducción y desvío de producción, preparación, enajenación, adquisición, importación, exportación… (DOF).
Considerándose, continúa el posicionamiento, como delitos sexuales el hostigamiento , el abuso, el acoso, pederastia, la violación, sexting, corrupción de menores, entre otros, por lo cual me permito recordarles que los jóvenes son solo nuestros alumnos y merecen todo nuestro respeto, así que evitemos todo tipo de saludos de mano, beso, abrazo, frases de doble sentido
Intercambiar número de teléfono privados o enviar mansajes a través de las diferentes redes sociales, hacer comentarios alusivos a su persona, sea belleza, inteligencia, porte o distinción, sea hombre o mujer, evitemos a toda costa pláticas en privado con ningún alumno o alumna”, pues este es parte del recordatorio que Melecio Cornelio le hace a sus agremiados, aunque no por ello los descuida, sino por el contrario, les recuerda sus deberes a fin de no caer en situaciones penosas, que aunque no lo menciona, como en la que se encuentran los dos docentes del Plantel 1 y el prefecto. Y mas adelante y ya para finalizar el posicionamiento de una hoja, exhorta a todos los sindicalizados de su organización a conducirse “bajo el código de ética siendo profesionales y cumplir con los protocolos que la ley general de los derechos de niñas, niños y adolescntes por lo qu no avalaremos conductas consideradas como violencia sexual en contra de cualquier alumno o alumna ya que incurriría en una responsabilidad penal, haciéndose acreedor a las penas y medidas que el mismo código establece”, obviamente el dirigente sindical asegura que no le da la espalda a sus agremiados, pero en casos extremos como lo que sucede con el maestro Bolio, estamos seguros que permitirá e incluso colaborará con las autoridades, de darse un caso similar, ya que la dirigencia de ese sindicato siempre ha actuado dentro de la ley. Y lo peor es que no es el único plantel que presenta esos problemas, sino también el 14 donde se acusa de acosador a un prefecto, mañana les informamos lo que pasa en ese plantel, también del Colegio de Bachilleres que a mese de haberse asumido el control del subsistema, no hay control.
