¿Amarga luna de miel?
Claudia Sheinbaum Pardo prefirió irse de luna de miel estos días, cuando en el país crece el rechazo y el choque en el legislativo por la reforma judicial que pretende aprobarse a chaleco desde el oficialismo.
Como nunca en la historia, los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nacional (SCJN) se fueron a paro laboral en solidaridad con trabajadores, jueces y magistrados que realizan protestas contra la legislación del inquilino de Palacio Nacional.
Las inconformidades incluso se han replicado con marchas en otras entidades de la república, incluida la tierra de López Obrador.
Ayer estudiantes de la División Académica de Ciencias Sociales y Humanidades de la UJAT se sumaron al movimiento nacional contra la reforma al Poder Judicial y convocaron a marchar por las calles de Villahermosa.
Esto, mientras en la Ciudad de México, diputados de Morena y sus aliados del PVEM y PT decidían discutir la reforma judicial en una sede alterna al palacio de San Lázaro para huir de las inconformidades.
Mientras todo eso ocurría ayer martes, la próxima presidenta de México disfruta de su luna de miel con su esposo, Jesús María Tarriba con quien contrajo nupcias en noviempre pasado en plena precampaña.
Además de la protestas y los encontronazos en el Congreso de la Unión, persiste también la incertidumbre sobre los hechos de violencia ocurridos en Sinaloa y el nerviosismo en los mercados internacionales que afecta el peso mexicano.
En su más reciente declaración sobre la reforma judicial, el embajador de EU en México, Ken Salazar volvió a insistir que de aprobarse la propuesta de AMLO, se corren riesgos comerciales entre ambos países por violaciones al T-MEC ante la falta de certeza jurídica para la inversión extranjera.
Aunque Sheinbaum declaró antes de irse de luna de miel que la reforma judicial no se aprobaría en los primeros días de septiembre, todo hace ver que los legisladores caminan en otro sentido para cumplir las directrices de Palacio Nacional.
El caos que le heredará López Obrador a Sheinbaum a su regreso, y en la víspera de que asuma el poder el próximo 1 de octubre, es de proporciones incalculables, en lo político, económico y social.
Este miercoles los diputados de Morena y sus aliados tienen programado dejar planchada la cuestionada reforma judicial que busca elegir a ministros mediante el voto popular, aún contra la gestación de un movimiento que ya es nacional. ¡Aguas!
