Alí, Bracamontes y Lanz, hombres de mucho poder
Un hombre insufló desde su poderosos lugar al actual gobernador electo de Tabasco, Javier May. Quién le inyectó esa fortaleza fue el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
Javier cometió un error que estuvo a punto de costarle su carrera, pero AMLO, amoroso compañero de cruentas luchas contra el poder del PRIANPERD, LO RESCATÓ y lo hizo gobernador.
Bastó con no aceptarle su renuncia a la Secretaría del Bienestar, enviándolo a la construcción del Tren Maya, que le restituyó todo su poder. Luego, cuando Javier fue a su “mañanera” a decirle que buscaría la gubernatura de Tabasco, bastó con decirle AMLO a todos los demás: “Javier va a buscar la gubernatura, me lo ha comunicado, y sé que le va a ir muy bien”.
En ese momento, AMLO nos comunicaba a todos que May era el candidato que “él” había decidido. Enseguida, una magnifiscente campaña de prensa hizo que May aplastara a cualquier adversario. Los periódicos forjan a los hombres de política, Adán Augusto fue el único que no entendió este mansaje, y todo lo que se diga mal de él es producto que quitó a la prensa de la prensa a la que abandonó cuando quiso quedar bien con AMLO.
No todos pueden quietarle el dinero a la prensa.
Bien, hoy esa prensa ha forjado tres nombres y les ha inyectado todo el poder del universo: Jesús Alí (próximo subsecretario de Gobierno), Jorge Bracamontes, hoy presidente de la JUCOPO de la cámara local de Diputados, y el médico Manuel Antonio Pérez Lanz, director de IMSS BIENESTAR delegación Tabasco.
Ese es el verdadero poder que despreció ADÁN AUGUSTO- EL PODER DE LA PRENSA.
Entiéndanlo ustedes puertas viejas, escúchenlo ustedes, desvencijadas ventanas. Los políticos bien harían en reconsiderar el poder del periodismo que hoy tienen a Jesús Alí, a Jorge Bracamontes y a Manuel Antonio Pérez Lanz como hombres principalísimos en la política de Tabasco….
