May: ¿El triunfo o los Números?
Por: Mario Gómez y González
Aunque la democracia no se puede reducir únicamente a prácticas electorales, las elecciones son el mecanismo por excelencia para la designación de los gobernantes, la participación política de la ciudadanía y el control del gobierno por ella.
De pronto o no tan de pronto, pero lo cierto es que la dinámica nacional por donde transita el proceso electoral federal, “contagia” o transmite determinados escenarios al ámbito de las elecciones locales que, como en Tabasco, proporcionarán un nuevo armado político administrativo de la entidad para los próximos seis años.
El trazo numérico realizado por los estrategas políticos de la abanderada de Morena a la presidencia de la república-estado por estado- determinó que Tabasco podría aportar a la causa un millón de votos, tomando en cuenta (subrayando diríamos), que lo básico es obtener la mayoría absoluta en el congreso federal.
Al tanto de este “trazo numérico” del equipo de Claudia Sheimbaum, el abanderado vinotinto al gobierno estatal Javier May Rodríguez, se comprometió aportar un millón 200 mil sufragios (un seis de seis), lo cual-más allá de las cuentas alegres y los números carnavalescos de las elecciones- constituyen un verdadero reto para el primer candidato auténtico de la izquierda (surgido y formado en ella), para Tabasco.
De entrada, insistimos en que Javier May, no tendrá problemas para ganar las elecciones de gobernador; sin embargo, el paso de los días muestra que en varios municipios las tendencias no les son del todo favorables y que, por lo tanto, no habría de extrañarse que algunas alcaldías no fueron “guindas” y que, también, algunas curules en el congreso estatal, serían para los partidos de oposición.
Eso sí, de sacar Javier May, el millón 200 mil votos, no solo lo haría parecer como todo un “súper gobernador” (con la solvencia moral que le darían los números, insistimos, por encima de la cifra comprometida), sino que, además y mucho ojo con esto, le estaría cumpliendo a cabalidad a Claudia Sheimbaum, ubicándolo como un gobernador de palabra y que si sabe cumplir sus promesas.
Por el contrario, de no cumplir con la meta de sufragios prometida, podría iniciar con el pie izquierdo su gobierno, ya que, de entrada, no le cumpliría el compromiso con el “proyecto nacional” y se presentaría ante los tabasqueños como que no cumplió con su promesa, haciéndolo vulnerable a críticas y comentarios, de los contra pesos (sociales, políticos, académicos, empresariales), que van a seguir con lupa su administración.
Es por eso que ya se percibe un rediseño en la campaña del comalcalquense a la gubernatura de la entidad; casa por casa y no ya las largas caminatas, porque se trata de enamorar al electorado para que salgan a votar por Morena, haciendo a un lado la invitación para participar en los comicios con la emisión de sus respectivos sufragios.
Es cierto, ni Adán Augusto López Hernández, ni el mismo Andrés Manuel López Obrador, obtuvieron el millón de votos (apenas llegaron a 700 mil poco más o menos); de ahí, insistimos, el rediseño de la campaña, “aderezado” ya con un brutal “saca-aceite”, que existe en el equipo de May Rodríguez y donde “la manzana de la discordia”, tiene nombre y apellidos: Evaristo Hernández Cruz.
¿ejemplos o pruebas?, Evaristo Hernández Cruz, le organizó al candidato un evento con la sección 29 del SNTE, pero lo hizo en día hábil y con la promesa de que les justificarían sus faltas, por motivos del encuentro con May; de la misma manera, las reuniones con los sindicatos del Colegio de Bachilleres de Tabasco (COBATAB) y del SITET, fueron cancelados. La irritación es tal en contra de Evaristo, que los jaloneos son ya cotidianos, al grado que el coordinador de la campaña Pepín López Obrador, anda junto a May y no se le despega.
A Javier May Rodríguez, ya no le preocupa el resultado de la elección porque sabe perfectamente que saldrá triunfante; lo que le “ocupa”, es la cantidad de votos a los que se comprometió; él es todo terreno y seguramente ya trabaja en la estrategia para que los números le cuadren.
Jaque Mate** Carlos Enrique Íñiguez Rosique (“Caliche”) – candidato a diputado local por el distrito “10” con las siglas de Morena- representa la salida aterciopelada del actual gobierno de Tabasco y el eje o piedra angular por donde deberá transitar la gobernabilidad durante el próximo periodo constitucional y legislativo** así de sencillo** fue todo por hoy** hasta mañana Dios mediante.
